lunes, 9 de noviembre de 2009

Faith no more por más


América L. Méndez Osorio/ Subterráneos


En las empresas es común escuchar el término “rotación de personal”, el cual se da cuando el empleado no cubre las necesidades de su puesto, y por voluntad propia o por despido tiene que abandonar su lugar y ser ocupado por alguien más capaz; pero éste hecho se puede dar en cualquier organización social, incluyendo las bandas de rock.

En el año 1981 nace en California la banda de metal “Faith No Man” El grupo estaba integrado en la voz por Mike Morris, en la batería Mike Bordin, en los teclados Wade Worthington, en el bajo Bill Gould y en la guitarra Marc Bower. En ese tiempo la banda se limitaba a tocar en bares locales.

Faith No Man sufre su primera transformación en 1982 cuando Morris y Worthington salen de la banda por diferencias con los demás integrantes. Las audiciones comienzan y la voz es ocupada por Courtney Love quien sólo permaneció en ese puesto por seis meses y sería sustituida por Chuck Mosely. Mientras tanto Rodd Bottum llegó a ocupar los teclados.

Para esta nueva etapa la banda no sólo cambia integrantes, también de nombre: “Faith No More” y lanzan en 1985 su primer disco We Care a Lot. En 1987 editan su segundo álbum Introduce Yourself, ambas producciones fueron un éxito comercial en Europa, pero no en Estados Unidos. En esa época el grupo se caracterizó por tener letras de jóvenes desenfadados que cuestionaban las preocupaciones de los adultos y de sus banales trabajos que en lugar de mejorar al mundo lo hundían en la ignorancia. En sonido el aporte provenía de un mayor manejo de funk y música electrónica.

Ante tal apariencia de victoria la banda se desmoronaba por el alcoholismo que aquejaba a su vocalista, a quien tuvieron que despedir. Nuevamente había una vacante; y con grandes dudas por su poca experiencia musical se une a sus filas Mike Allan Patton de 19 años, quien provenía de una banda de rock experimental Mr. Bungle. Tras ese ambiente de desconfianza, en 1989 Faith No More graba su tercer disco The Real Thing, en el cual Patton tuvo que componer las letras de las canciones en dos semanas.

Esta producción tenía fusiones de jazz, hip hop, punk y soul, sin perder el sonido primigenio del grupo. Las variantes también se encontraban en la voz, pues Patton podía interpretar desde los sonidos guturales del metal hasta el más elaborado beatbox. Este sello marcaría el nuevo sonido de “Faith No More”.

De este disco se desprende uno de sus grandes clásicos “Epic”, la cual fue muy famosa, pero poco entendida en su tiempo. La letra habla –según Patton- sobre el orgasmo de un adolescente provocado por la masturbación. Esta canción permitió que la banda conquistara la radio Europea y por fin la estadounidense.

En 1992 lanzan su cuarto disco Angel Dust, a mitad de la grabación de éste álbum el guitarrista Martin decide dejar la banda, pues no sentía empatía con el nuevo rumbo de la banda. Faith No More tuvo que salir de gira con un guitarrista provisional. Es hasta 1997 cuando consiguen un guitarrista de planta llamado Jon Hudson y en ese mismo año lanzan Album of the Year. Al siguiente año la banda sufre una de sus mayores fragmentaciones al anunciar la desintegración de Faith No More; ya que Patton tenía otros proyectos musicales como Mr. Bungle y Fantômas; mientras tanto Bordin se divertía como baterista en las giras de Uzzy Osbourne, Bill Gould experimentaba tocando el bajo con la banda mexicana de metal “Brujería”.

Once años después, Faith No More regresa con la alineación de 1998, tal cual se hubiera detenido el tiempo. Para celebrar lanzan el disco The Very Best Definitive Ultimate Greatest Hits Collection y además de la gira “Second Coming Tour 2009”, la cual comenzó en junio en Londres, y ha llegado a Suiza, Italia y hasta Perú.

En este tour también aparece México, que recibirá a Faith No More el 13 de noviembre en el Pabellón del Palacio de los Deportes con un costo general de 400 pesos; los fans podrán escuchar temas como “Just a Man”, “We Care A Lot”, “Epic”, “A Small Victory”, entre muchos otros.

La fe de verlos reunidos nunca murió en sus seguidores y menos en los integrantes de Faith No More, es por ello que vienen por su segunda vuelta, haciéndonos recordar la pureza, la vehemencia y autenticidad del tan ahora pervertido “rock alternativo”.

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