jueves, 13 de octubre de 2011

Poemas de rock y pachucos



Presentadores del proyecto del proyecto Pachuco Prees. Foto: Wendy Pardo/Subterráneos

 

El escritor Juan Carlos Hidalgo presentó poemario en Puebla

Poemas de rock y pachucos


Hugo Cabrera, Andrea A. de Gante, Areli González/Subterráneos
 * “Hay aspectos importantes dentro de la cultura pop que no tienen por qué ser desechables e incluso elevar la calidad de las letras, aunque desafortunadamente siento que este año no recibimos la sorpresa de que ganara Bob Dylan el Nobel de literatura”

Puebla, Puebla. El columnista de Subterráneos, Juan Carlos Hidalgo, realizó la presentación en Puebla del proyecto Pachuco Prees, así como de los poemarios Combustión No Espontánea y Escuela del Vértigo, junto con Daniel Fragoso, en La casa de lectura, Profética, 3 sur 701, el pasado viernes 7 de octubre, que además reunió a el ilustrador David Ruiz y al escritor Luis Felipe Lomelí.

Juan Carlos estuvo acompañado por David Ruiz, Enrique Garnica, artista visual, y Fausto Alzat, para la presentación del poemario, así como la plaquette Lecciones para el Crepúsculo, inspirada en música de Aidan Moffat, músico escocés, The Raveonettes, grupo de rock danés y Joe Crepúsculo, cantante español, la cual se regaló a los asistentes.

La introducción del poemario de Daniel Fragoso fue dada por sus amigos Luis Felipe Lomelí y Federico Vite. Destacó la presentación de Pachuco Press, proyecto formado por Juan Carlos Hidalgo, Enrique Garnica y Daniel Fragoso, que es una “plataforma de producción independiente para editar libros, hacer conciertos”, entre otras actividades; esta compañía fue la responsable de traer al grupo inglés Radiohead a Hidalgo, en los 90.

Juan Carlos Hidalgo, quien también es columnista en el diario Milenio y la revista Marvin, en entrevista para Subterráneos, comenta:

Vienes a presentar un cuadernillo de poemas, cuéntanos ¿de qué se trata?

—Es un libro de poemas de Daniel Fragoso, que se llama Escuela del Vértigo, una plaquette, que es mía, Lecciones para el crepúsculo, inspirada completamente en músicos, tomando anécdotas de sus vidas, pasajes, y recreándolos a través de la poesía y que tiene las ilustraciones que el poblano David Ruiz, “Calamdrajo” realiza con un ipad. El libro final a presentar es Combustión no Espontánea: poemas bonzo para el siglo XX, es un acercamiento a cómo funciona o cómo se está dando el suicidio en la sociedad contemporánea. Un poco a raíz de los hikikomori de Japón, y entonces también me atrevo a transgredir la tradición oriental y mezclar la tecnología haciendo unos haikus digitales.

Hablando de transgredir, ¿el rock está transgrediendo?, veo que muchas bandas ya ni siquiera recurren a la literatura, que ya muchos optan por hacer música y las letras desalojarlas, por decirlo de algún modo

—Yo creo que es muy difícil hablar de a tabla rasa, porque hay distintos estratos dentro del rock n’ roll y efectivamente hay muchas bandas que han sido cooptadas por la industria musical. En algunas su mensaje es muy frívolo, pero siempre se encontrarán verdaderos artesanos de la música, que entienden que la canción puede ser una forma elevada de arte y que van a sorprender. El rock n’ roll, como muchos otros tipos de música, se somete a un proceso dialéctico que lo mantiene en constante movimiento. Lo que un día fue válido después será negado, pero en alguna parte del inframundo se están gestando otras propuestas, que pueden ser intensamente emocionantes. Yo recomendaría a un grupo de chavos de 20 años de Manchester que se llaman Gulai, que es una verdadera guerrilla urbana. Ellos se han logrado superar, de cómo hacer un grupo de Rock de Manchester teniendo a los Smiths a Happy Monday, en donde todos colaboran para ser un colectivo pequeño.

¿Dónde te podemos leer?

—Está circulando el especial de Marvin sobre mujeres. En lo personal, yo vengo a hablar de PJ Harvey, en donde vuelve a hablar del discurso femenino, de lo manoteado que es el tema. Es un disco bastante brutal que hay que escuchar, para conocer lo que atraviesa Inglaterra.

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